La pintura metafísica (en italiano: Pittura metafísica) es el nombre de un movimiento artístico italiano, creado por Giorgio de Chirico y Carlo Carrá. Sus pinturas como sueños de plazas típicas de ciudades italianas idealizadas, como también las aparentemente casuales yuxtaposiciones de objetos, representaron un mundo visionario que se entrelazaba casi inmediatamente con la mente inconsciente, más allá de la realidad física, de ahí el nombre. El movimiento metafísico proveyó de significante ímpetu para el desarrollo del Dadaísmo y el Surrealismo.
Pintores:
Giorgio de Chirico: Pintor italiano. Nacido en Grecia de padres italianos, estudió a partir de 1906 en Munich, donde conoció la filosofía alemana y recibió influencias pictóricas de Klinger y, sobre todo, de Böcklin. De Chirico es reconocido entre otras cosas por haber fundado el movimiento artístico scuola metafisica.
El enigma de la hora (1912)
La incertidumbre del poeta (1913)
La tragedia y la comedia (1926)
Interventionist Manifesto (1914)
PINO SUL MARE.
The daughters of lot (1940)
Giorgio Morandi: Pintor y grabador italiano. Estudiante de la Academia de Bellas Artes de Bolonia, se centró en el grabado y en la pintura de paisajes y de naturalezas muertas, dominantes en su producción. Influenciado en sus inicios por los maestros italianos (Giotto, Uccello, Masaccio) y, con posterioridad, por Cézanne, el cubismo y el futurismo, su obra adquirió de forma paulatina una orientación metafísica. Desde 1920 se dedicó a la investigación de la realidad objetual (botellas, jarrones, cajas) y paisajística, reducida a su sobriedad esencial.
Autorretrato (1925)
Bodegón (1942)
Patio en Via fondazza (1958)